LA EDUCACIÓN ES EL ARMA MÁS PODEROSA QUE PUEDES USAR PARA CAMBIAR EL MUNDO


Compañeras, pero sobre todo amigas.

Parece que fue ayer cunado entrábamos todas por la puerta el primer día de clase. Empezábamos una nueva etapa de nuestra vida, como educadoras infantiles, pero diferente, porque llegábamos a un sitio lejos de nuestra casa y de nuestras amistades de siempre. Quizás eso era lo duro, el gran cambio que conllevaba.
Puede que por muchas de nosotras rondaban por nuestras cabezas muchas preguntas, ¿como serán?, ¿encajaré en el grupo?, ¿cuantos/as seremos en clase?,¿será difícil? y muchas más que podría decir.
Creo que la primera sorpresa que nos llevamos fue que todas eramos chicas y no había ningún chico, puede que también las distintas edades entre todas, pero eso nunca supuso ningún problema para nosotras.

A medida que ha ido pasando el tiempo nos fuimos formando como grupo, todas unidas y apoyándonos en todo. Los profesores y profesoras se asombraban del buen rollo que teníamos y decían que eso nunca había pasado, éramos el primer grupo que se llevaba tan bien en muchos años y podíamos sumarle la media de buenas notas que teníamos todas, otra cosa que tampoco pasaba a menudo con otros grupos anteriores al nuestro. Ponían en duda que pudiésemos seguir mucho tiempo tan unidas como estábamos, pero solo hay que vernos ahora, igual o mejor que al principio.

Hemos llegado al final y quiero agradecer a mis compañeras por formar parte de esta gran aventura, unidas por la enseñanza de la educación infantil, dos años juntas han dado para mucho, espero que siempre compartamos las ganas de mantener esta amistad muchos años más aunque esto se acabe.
Quiero que sepan que aunque estemos lejos unas de otras, sepáis que podéis contar conmigo, para echaros una mano cuando lo necesitéis y celebrar todo lo que consigáis.

Aunque a partir de ahora nuestros caminos se separan, quiero que sepáis que siempre nos encontraremos al final o en cada parada que hagamos, de eso se trata la amistad. Puede que no nos veamos en días, semanas, meses o  incluso años, sin embargo la alegría de veros siempre permanecerán intactas.

Gracias por ser dos de los mejores años que he vivido en una clase, por darme vuestra amistad y por hacerme parte de vuestras vidas, igual que ustedes ya sois parte de la mía. Gracias por todos los momentos divertidos que hemos compartido entre esas cuatro paredes, por no juzgarme y por compartir y entender mi personalidad.
Gracias por todas esas risas, por todas las bromas, por las conversaciones sin sentido y por aquellas que van acompañadas de consejos.
Jamás olvidaré estos dos años, y me siento orgullosa por el camino que vais a tomar cada una de vosotras y espero que, todo lo que venga, sea bueno para vosotras.

Pero no podía terminar sin darle tampoco gracias a todos y todas los profesores y profesoras que hemos tenido, por enseñarnos y darnos una visión en la educación infantil que a partir de ahora forjaremos nosotras. 

Esto ha llegado a su final, personas como vosotras son fáciles de querer, de apreciar... pero difícil de olvidar. Os deseo lo mejor y que todo os vaya todo bien.




Comentarios

Entradas populares de este blog